Swan song


No quiero escribir, pero lo estoy haciendo. No hay otra cosa que pueda hacer para acallar el grito sordo, mudo y ciego que trepa por mi garganta e incendia mis pulmones. Pienso en la ausencia, pero no quiero cederle tinta. Prefiero hablar del pasado, pero tampoco voy a hacerlo. No aquí. Cualquier recuerdo a medias es más valioso si evito exponerlo a miradas ajenas, porque para compartir las nostalgias, las preguntas y las heridas abiertas están ya los incondicionales. Todos los demás no sabéis nada, y es mejor así. La gente sigue paseando por la calle, el mundo gira en su cansino malvivir y, cada día, hay hombres que se enamoran de una desconocida en un vagón cualquiera del metro. Puede que, en memoria del hermano que marchó, esta vez se atrevan a vivir sin miedo. Por su recuerdo, llenaré un vaso; en su honor, recorreremos los caminos que faltan. Y aún así, nunca será suficiente.

3 divagando:

Enric Draven disse...

Ayer pensaba en escribir algo sobre un amigo que se marchó hace poco. Hará diez años, eramos super jovenes... Madre mía, el tiempo no nos perdona y nada acontece en vano, todo nos marca, no?

No dejes de escribir compadre, q te voy leyendo :)

Enric

Anónimo disse...

Aupa signore!!!!!!!!!dale duro a esos teclados, sigue mostrándonos tus rincones, contándonos lo que ves...dale vida a este pais, el dos placeres amargos, que aquí estarán tus lectores esperando a que nos cuentes.

Un abrazo!!!!!!!

Niko.

Anónimo disse...

A recorrer los caminos que faltan! Qué mejor homenaje!. Un abrazo. santi.

top