Pasaje en préstamo

Estoy de vuelta. El pasado, escrito en una montaña de viejos billetes. Siempre de pasajes de ida y vuelta, apenas un bis a bis. En la retina, profundo verde, lluvia, ciclón tropical en sevicios mínimos, nada más que otro paréntesis de nostalgia y carretera para enfilar otro retorno a la ciudad en permanente construcción.

Lo siento, Gus, una vez más me demoro en este diario inestable. No hubo Reperkusión´06 y mira que lo siento. Se que dilato las pausas valorativas y que no tengo excusa. Muy pronto, me asomaré más a menudo, desde un nuevo charraro que jubilará definitivamente a mi vieja ferralla. Sin sede fija, sin trabajo, frente a una enorme página en blanco que emborronar. Todo está por hacer, luego nada es imposible. Ya os iré contando.

Mientras tanto, un fragmento prestado de saudade irredenta, de verde rebelde que nace de las cenizas de la vergüenza calcinada:

O meu país
os cartos e os poderes adicados
a convencerme de que non hai tal país
que é invisible
unha alucinación
un delirio.

Estevo Creus
Decrúa
top